Horizonte Preclásico
Preclásico temprano (2500-100 a. c.)
Esta etapa se caracteriza por el descubrimiento de poblaciones sedentarias organizadas en aldeas, cuya principal fuente de subsistencia era la agricultura de temporal. Organización tribal igualitaria. También empezó a usar la cerámica, para tanto para vasijas como figurillas.
Preclásico medio (1200-400 a. c.)
Importantes cambios tecnológicos principalmente en agricultura: represas, canales terrazas. Variedad de plantas domesticas. Perfeccionamiento de la cerámica y la talla de piedra. Inicio de la especialización en la producción. Diferenciación social y surgimiento de jerarquías por linaje. Surgimiento del calendario y su escritura.
Preclásico tardío (400 a.c.-200 d. c.)
Agricultura intensiva y crecimiento rápido de la población. Desarrollo de la organización política. Expansión del comercio. Rivalidades y conflictos bélicos. Se consolidan las relaciones político-económicas entre las regiones surgen las primeras grandes ciudades de Mesoamérica.
· Cultura Olmeca (madre)
La cultura que sirvió de base para el desarrollo de las demás formadas en la región, fue la olmeca, de ahí el concepto de ´´cultura madre´´. Los olmecas irradiaron los elementos esenciales que darían forma al patrón mesoamericano de cultura, de ahí que se hable de una continuidad cultural desde 1500años a.C., hasta la conquista española.
Hay un cambio en el trabajo de la cerámica: el barro pulido y la decoración, generalmente de formas geométricas, y los colores diversos nos hablan de la importancia de las vasijas según su uso, ya sea para cocinar y guardar alimentos, para ceremonias rituales o bien para emplearse en las ofrendas a los muertos.
La expresión más palpable de la estratificación social olmeca la encontramos en sus ciudades, pues la organización de edificios, palacios, residencias y barrios tenían que ver con sitios políticos, económicos, religiosos y administrativos.
Lo más destacado de la cultura olmeca es su escultura, uno de los ejemplos más destacados son las cabezas olmecas de las cuales se desconoce su significado. Tienen indiscutiblemente, rasgos negroides, pero también se han reconocido en ellas rasgos asiáticos.
La práctica de urnas funerarias, mediante la colocación de objetos preciosos en las sepulturas estuvo muy desarrolladla la venta. Pocos sitios olmecas han sido explorados y, en realidad, solo tenemos datos un poco más certeros de La Venta o de San Lorenzo y en menor escala, de tres zapotes.
La historia de los olmecas, iniciada hacia el año 1500 a. c. termina con el abandono de los centros ceremoniales o ciudades, por razones hasta ahora desconocidas, aproximadamente hacia el siglo I d.C.
· Cultura zapoteca
Se desarrollo en Oaxaca. En la ciudad de monte Albán en un cerro donde se puede ver el valle de Oaxaca. Su origen se remonta al periodo preclásico entre los años 1400 y 1200 a.C. Para 100 d.C. monte Albán ya contaba con un observatorio astronómico. Se comenzó a trazar con gran precisión la gran plaza y edificios de la ciudad, construyeron canchas para el juego de pelota. Aunque su esplendor lo alcanzo en el periodo clásico, al igual que las culturas mesoamericanas eran politeístas. Fue abandonada la ciudad hacia el año 800d.C.
El opeño
El Opeño es un yacimiento arqueológico que se localiza en Jacona de Plancarte, un municipio del estado mexicano de Michoacán enclavado en el Valle de Zamora. Da su nombre a una cultura precolombina conocida especialmente por los materiales de cerámica encontrados en los complejos funerarios de la zona, mismos que han sido fechados en el Preclásico Tardío de Mesoamérica. La importancia de El Opeño en la arqueología mesoamericana radica en su antigüedad y en la amplia difusión de su estilo, contemporáneo de otros desarrollos culturales indígenas como la cultura Capacha y anterior a la cultura de Chupícuaro que se desarrolló en el Bajío. Las tumbas de El Opeño son las más antiguas de Mesoamérica. Han sido fechadas alrededor del siglo XVI a. C., por lo que anteceden el desarrollo de la cultura olmeca, que tuvo sus centros principales en la costa del golfo de México y floreció unos siglos más tarde. Los descubrimientos de El Opeño fueron un hito que permitió poner en tela de juicio el carácter que se atrubuía a los portadores de la cultura olmeca como los fundadores de Mesoamérica.